Bogotá, mayo de 2025— El asma afecta a más de 300 millones de personas en el mundo y provoca más de 450.000 muertes cada año. En Colombia, se estima que uno de cada ocho ciudadanos padece esta enfermedad, convirtiéndola en una de las principales causas de ausentismo laboral y escolar. A pesar de que existen tratamientos efectivos —principalmente los inhaladores con medicamentos de control (corticoesteroides inhalados y broncodilatadores), solo la mitad de los pacientes acceden y los utilizan correctamente.
Este año, la Iniciativa Global para el Asma (GINA) ha escogido como lema para el Día Mundial del Asma 2025: “Lograr que los tratamientos inhalados sean accesibles para TODOS”. El mensaje es claro: el acceso a estos medicamentos no puede seguir siendo un privilegio, sino un derecho garantizado.
La Fundación Neumológica Colombiana, a través de su programa Asmaire Rexpira, ha implementado desde 2021 un sistema de monitoreo y gestión para más de 2.000 pacientes con asma. Gracias a esta estrategia, se han identificado y solucionado barreras relacionadas con la disponibilidad, entrega y continuidad de los tratamientos inhalados. Esto ha permitido alcanzar tasas de adherencia del 74% en pacientes adultos y pediátricos, por encima del promedio internacional.
“Cuando un paciente no accede a su tratamiento por falta de entrega o costos elevados, su salud se deteriora, pero también se genera un mayor gasto al sistema por hospitalizaciones o emergencias que pudieron evitarse”, explica Libardo Jiménez Maldonado, líder clínico del programa.
La Fundación hace un llamado conjunto a todos los actores del sistema de salud:
• A las EPS y entidades dispensadoras: garantizar la entrega oportuna y continua de medicamentos esenciales, especialmente inhaladores y terapias biológicas.
• A los profesionales de la salud: hacer seguimiento periódico a la adherencia de sus pacientes y activar rutas de gestión ante cualquier barrera identificada.
• A los pacientes y familias: comprometerse con el tratamiento, usar recordatorios y dialogar con sus médicos sobre el dispositivo que mejor se adapte a su rutina.
La evidencia demuestra que cuando hay acceso, acompañamiento y compromiso, los resultados mejoran significativamente. Hacer realidad el lema de GINA 2025 no solo es posible, sino urgente.
